Jardín de las creces

La Gomera se ha convertido en un modelo para el Turismo Sostenible. Hoy es posible conocer la isla recorriéndola a través de su amplia y variada red de senderos perfectamente enlazados y distribuidos por toda la geografía insular

Jardín de las creces

Es la isla que lleva más tiempo sin tener erupciones volcánicas, por lo que no es posible observar conos recientes, pero sí los restos de los edificios basálticos en forma de grandes roques.

En su interior se encuentra la mayor concentración del mundo de Laurisilva, bosque milenario del Terciario, que se extinguió en Europa debido a los cambios climáticos de la Tierra y que hoy solo sobrevive en la zona geográfica de La Macaronesia, que se ha convertido en su refugio.

Un bosque de bosques, acariciado continuamente por los vientos Alisios y capaz de retener esa humedad para transformarla en agua. Refugio de muchas aves que solo viven en este habitat y que podemos oír si caminamos en silencio por sus senderos.

Esta gran selva canaria está dentro del Parque Nacional de Garajonay y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO (1986) y Zona de Especial Protección para las Aves (1988).

De los más de 60 itinerarios habilitados para la práctica del senderismo vamos a escoger el Jardín de Las Creces (debe su nombre al fruto de la faya), señalizado como el sendero número 5 del Parque Nacional. Es una ruta circular de escasa dificultad y con un área recreativa en el transcurso del trayecto donde podemos descansar.

Nuestra ruta sale de la ermita de Las Hayas, que debe su nombre al árbol del mismo nombre también llamado faya (Myrica faya) y es uno de los componentes de este bosque. Detrás de la ermita comienza nuestro sendero con la señalización de GR 131 que nos indica Las Creces en dirección a Vallermoso.

Continuando por este sendero, pronto nos encontramos el cartel de la entrada al Parque Nacional de Garajonay y más adelante un cruce en el que nos indica que debemos escoger hacia la derecha. Este nos lleva hasta una pista de tierra que también debemos continuar hacia nuestra derecha por el sendero del Parque Nacional señalado con el número 5.

Jardín de las creces

Esta pista nos lleva hasta el área recreativa, antes mencionada, Jardín de Las Creces donde podemos descansar y estar un rato en silencio para escuchar los sonidos del bosque en armonía con el cantar de los pájaros que viven en este tipo de hábitat. Debemos destacar la Paloma Rabiche (Columba junoniae) y la Paloma Turqué (Columba bollii).

Continuamos nuestro itinerario abandonando la pista y descendiendo por un estrecho y encantador sendero hasta el próximo cruce con una indicación que nos llevaría al pueblo de Arure. Ignoraremos esa indicación y subiremos por el mismo sendero número 5 hasta la pista que nos cruzamos al principio para regresar deshaciendo el primer tramo hasta nuestro punto de partida, la ermita de Las Hayas.

senderos

Para que este entorno siga en perfecto estado debemos tener en cuenta una conducta especial de conservación a la hora de visitarlo: no debemos salirnos del sendero, no debemos coger ni tirar nada al suelo, no debemos emitir ruido innecesario que pueda perturbar el habitat de su fauna ni darles de comer.

Si quisiéramos más información, debemos de ponernos en contacto con la administración del Parque Nacional de Garajonay (922 800 993).

Es posible llegar a donde se inicia y acaba esta ruta, en el pueblo de Las Hayas, en transporte público (922 141 101) o en vehículo particular.

Como información complementaria, le comunicamos que en este pueblo existen dos casas de comida donde podemos degustar la gastronomía tradicional gomera.