Solitaria, con las aguas turquesa que la acarician y su arena blanca reluciente, la playa de Las Conchas en la isla de la Graciosa, frente a la costa norte de Lanzarote, es una de las secretas aventuras que reservan el sol y el mar en las Islas Canarias
Al norte de Lanzarote, el pequeño archipiélago Chinijo salpica el mar con tres islas y dos islotes. La mayor de las islas, la Graciosa,. la única habitada, conserva su naturaleza silvestre. Playas vírgenes cargadas de arena fina y blanca y algunas colinas interiores que no superan en ningún caso los 250 metros de altura, son el paisaje árido y solitario que se observa,. moteado de matorrales. Es un refugio de calma, sin ruidos ni prisas en medio del océano y. con la sensación vital de saborear terreno salvaje.
A la Graciosa llegarás con un ferry que realiza el trayecto desde el puerto de Órzola,. en la costa norte de Lanzarote. La nave atraca en Caleta de Sebo,. en la costa occidental de la isla, el núcleo principal que conserva la tranquilidad y el aspecto de una población pesquera.
Desde allí se inicia la aventura de descubrir una playa original:. Las Conchas. En Caleta de Sebo puede alquilarse un taxi que te trasladará en poco más de cinco minutos o bien una bicicleta que demorará veinte minutos o quizá resulte más interesante realizar el trayecto a pie,. durante unos cincuenta minutos: deberás cruzar andando el pequeño collado entre Las Agujas (266 m). y El Mojón (188),. dos de las alturas de la isla, para recorrer los senderos paralelos a la costa occidental que te conducirán hasta la paradisíaca playa situada al pie de la Montaña Bermeja (157 m), un volcán apagado que completa el paisaje.
Sensación de libertad en Playa de Las Conchas
Las Conchas es una extensión de seiscientos metros de extensa playa de arena blanquecina abierta al estrecho que separa la isla de La Graciosa de las otras dos islas deshabitadas del pequeño archipiélago, Montaña Clara y Alegranza. Las aguas son turquesa transparentes y a veces el oleaje se hace más turbulento de lo
normal. Sin embargo es muy apta para el baño en sus orillas y también para disfrutar del panorama natural de su paraje rústico. Es una de esas playas para perderse andando bajo el sol, jugar a cualquier deporte en la arena en pareja o con los niños, y percibir todo el tiempo la sensación de libertad.
Conviene llegar desde la primera hora del día, entre las diez o las once de la mañana, considerando el viaje previo en ferry. Y, según el medio de transporte que utilices, emprender el regreso entre las siete y las ocho de la tarde a Caleta de Sebo, para aprovechar las horas de sol.
Celebra tu boda en Playa de Las Conchas
No todo son salvajes paisajes volcánicos y arena negra. Las opciones para casarse en la playa también incluyen idílicos lugares de aguas turquesas y fina arena blanca. Éste es el caso de la playa de las Conchas, situada en la zona norte de la pequeña isla de la Graciosa, frente a Lanzarote. Considerada la playa más bella de la isla y una de las más bonitas de España, está enmarcada por el imponente volcán Montaña Bermeja, cuyo rojo contrasta con el dorado de la arena, el azul infinito del cielo y los tonos verde azules del mar.
Cómo llegar: Las Conchas se encuentra a poco más de cinco kilómetros del principal núcleo habitado de La Graciosa, Caleta de Sebo. Aunque mucha gente llega en bicicleta, existen taxis que conducen a esta playa.
Comments: no replies